martes, 9 de octubre de 2012


Miqueas 4:4-5

Todos vivirán en paz y prosperidad;
    disfrutarán de sus propias vides e higueras
    porque no habrá nada que temer.
¡El Señor de los Ejércitos Celestiales
    ha hecho esta promesa!
Aunque las naciones que nos rodean sigan a sus ídolos,
    nosotros seguiremos al Señor nuestro Dios por siempre y para siempre.